5 consejos para sacar el máximo provecho a tu notebook gamer

5 consejos para sacar el máximo provecho a tu notebook gamer

Si tienes un notebook gamer, saber cómo sacar el máximo provecho a tu equipo puede hacer una gran diferencia en tu experiencia de juego. Para ello, hay algunos trucos y recomendaciones que vale la pena probar. Encuentra aquí todo lo que necesitas saber para vivir al máximo tus horas de diversión frente a la pantalla:

Cómo aprovechar tu notebook gamer en cinco tips

Si quieres darlo todo en esa emocionante partida, te interesará saber las formas en que puedes lograr que tu equipo te acompañe con su máximo rendimiento.

1. Optimiza tu conexión para reducir el lag

Si alguna vez has sufrido de ralentizaciones jugando online, es probable que hayas sido víctima de uno de los principales enemigos de todo gamer: el lag. 

Este concepto se refiere a cualquier respuesta lenta notable en un juego online debido a una alta latencia. Es decir, un tiempo de respuesta demasiado largo entre los recursos que tu equipo intenta consumir del servidor, y la entrega de esos recursos.

Ahora, ¿cómo puedes optimizar tu conexión a Internet para no sufrir de retrasos al jugar en línea? Una de las maneras más efectivas es usar un cable Ethernet en lugar de conectarte a la red de manera inalámbrica, sobre todo si tienes una conexión wifi muy débil. Esto te proporcionará una conexión más estable y una velocidad constante.

Cabe mencionar que no siempre hace falta volver a una vida “con cables” para optimizar tu conexión. Por ejemplo, el notebook Nitro 5 de Acer es un modelo para gamers que viene con la tecnología Killer, la cual te permite delegar la administración de tu ancho de banda. Así, la aplicación monitorea automáticamente el consumo de datos y prioriza el tráfico de mayor prioridad, para que puedas beneficiarte de juegos más fluidos.

2. Ahorra ancho de banda para disminuir el ping

De forma similar, el ping mide el retraso entre el input de los jugadores y la respuesta de los servidores. El input cualquier decisión mientras estás jugando online (como ingresar a una cueva o hacer un ataque especial).

La diferencia entre el ping y el lag, es que el lag se refiere al retraso en sí, mientras que el ping es la medición en milisegundos (ms) de ese retraso. Por ejemplo:

  • Un ping de 15 ms o menos se considera excelente
  • Entre 15 y 45 ms es bueno
  • Desde 45 a hasta 100 ms es aceptable.

Un ping de más de 100 a 250 ms puede ser apenas jugable, mientras que cualquier número por encima de los 250 ms será una tortura.

Por supuesto, la jugabilidad también depende del nivel de dificultad del juego y del género: en los FPS (first-person shooter), un ping alto será en un rango de 50-90 ms, mientras que los MMO (massively multiplayer online) y los juegos de RTS (estrategia en tiempo real) tienden a ser menos sensibles.

Para disminuir el ping, asegúrate de cerrar las aplicaciones en segundo plano que estén acaparando tu ancho de banda antes de comenzar a jugar. Esto incluye apps de streaming de música o vídeo y plataformas de redes sociales, ya que consumen bastantes datos de Internet.

3. Ajusta la tasa de refresco y los FPS

¿Alguna vez has tenido la impresión de que tu pantalla se divide en dos mientras juegas? No es tu imaginación, son los males del tearing. Pero descuida, hay formas de evitarlo.

Básicamente, el tearing es un efecto visual de “desgarro” que ocurre cuando la velocidad de los fotogramas por segundo (FPS) y la frecuencia de actualización de la pantalla no coinciden. Esto causa divisiones verticales u horizontales, así que, en lugar de recibir un escenario completo, es probable que tengas un marco incompleto con la parte superior o inferior partida a la mitad.

Afortunadamente, hay formas de evitar que se produzca este efecto desagradable para cualquier jugador. La solución más sencilla es instalar la aplicación Intel Graphics Command Center desde Microsoft Store.

Esta herramienta exclusiva de Intel te permite alinear la velocidad de los FPS de tus videojuegos con la tasa de refresco del monitor. Para ello, solo tienes que activar la Sincronización Vertical (VSync) en las opciones de configuración.

4. Haz overclock con moderación

El overclocking es, seguramente, uno de los términos gamer más populares y controversiales en Internet. En pocas palabras, esta práctica consiste hacer que tu CPU, GPU o ambas trabajen a una velocidad mayor a la configuración de fábrica, para así conseguir un rendimiento más alto.

Aunque es cierto que el overclocking te puede ayudar a correr ciertos videojuegos cuando tienes un notebook con un hardware de menor capacidad, debes saber que también hay riesgos involucrados, como el sobrecalentamiento.

Por eso, es indispensable que tu equipo tenga una buena ventilación para evitar que el exceso de calor te cause problemas (desde apagones hasta daños permanentes).

Dicho esto, ¿vale la pena arriesgarse? La verdad es que todo depende de cómo lo hagas. Si quieres experimentar el potencial ilimitado de tu máquina, lo recomendable es que la configuración la realice un técnico profesional. Esto reduce el riesgo de que tu equipo sufra daños, algo muy importante considerando que el overclocking elimina la garantía del fabricante sobre el equipo y sus componentes.

Por otro lado, si tienes un notebook Acer con procesador Intel y tecnología Turbo Boost (como los modelos Nitro 5 y Predator Helios) llevas mucha ventaja, ya que estos notebooks te facilitan el proceso de overclocking dándote control sobre detalles como el funcionamiento de los ventiladores y el monitoreo de la temperatura.

5. Monitorea los signos vitales de tu notebook

Igualmente, siempre es bueno que monitorees la respuesta de tu máquina frente a las exigencias de tus videojuegos favoritos usando aplicaciones como Prime95. De este modo, sabrás si la temperatura y la velocidad del procesador están dentro de lo normal, especialmente si estás haciendo overclock.

Una vez más, los equipos Acer que vienen con el exclusivo software NitroSense te hacen la vida mucho más sencilla, ya que puedes monitorear aspectos como la velocidad de los ventiladores, configurar el plan energético de tu notebook y acceder a un panel de control detallado, para así conseguir el mejor equilibrio en el rendimiento.

¿Qué hacer si tus juegos “crashean” todo el tiempo?

Hasta ahora, has visto algunos de los términos gamer que más impactan en tu experiencia de juego, así como recomendaciones para evitar estos problemas. Pero hay otro fenómeno común del que muchos gamers se quejan: los juegos que crashean. 

Aunque esto puede ocurrir por muchas razones, generalmente se puede solucionar atendiendo alguna de las siguientes causas frecuentes:

  • Revisa las especificaciones del juego y ajusta la configuración.
  • En caso de que hayas hecho overclock, disminuye la configuración para evitar forzar demasiado la CPU/GPU.
  • Actualiza tu sistema operativo y los controladores de la GPU.
  • Verifica la velocidad de tu conexión, si es muy lenta, prueba con un cable Ethernet o configura tu tráfico de red en la app Killer Control Center de tu notebook Acer.

Notebook Acer: una revolución definitiva en tu experiencia de juego

Como puedes ver, hay muchas formas de optimizar tu experiencia como jugador cuando tienes un notebook gamer de Acer. Estos equipos están diseñados y fabricados pensando en las necesidades de los jugadores, es fácil configurar detalles como el tráfico de red, el comportamiento de los ventiladores y hacer overclock de manera más segura.

Si todavía no tienes un notebook de la línea gamer, ¡no esperes más! Visita la Acer Store para conocer todos los modelos y encontrar tu compañero de juego definitivo.

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